Apertura de edificio La Nave en Barrio Puerto impulsa la reactivación del comercio local

El uso municipal del emblemático edificio ha potenciado uno de los puntos comerciales más importantes de Valparaíso. Desde octubre por la instalación de las oficinas de la Dirección de desarrollo económico y cooperación internacional de la Ilustre Municipalidad de Valparaíso, y luego por la llegada el mes de diciembre de los Juzgados de policía local […]

26 de diciembre de 2023

El uso municipal del emblemático edificio ha potenciado uno de los puntos comerciales más importantes de Valparaíso.

Desde octubre por la instalación de las oficinas de la Dirección de desarrollo económico y cooperación internacional de la Ilustre Municipalidad de Valparaíso, y luego por la llegada el mes de diciembre de los Juzgados de policía local 1, 2 y 3, el sector de Barrio Puerto ha visto potenciado su vida comercial. Hace un año el Municipio decidió arrendar el remodelado edificio ubicado en calle Serrano, a un costado de la Plaza Sotomayor, como una forma de reactivar uno de los puntos comerciales claves de Valparaíso. De ese modo, alrededor de 200 trabajadores se trasladaron al lugar, lo que sumado a las cerca de 2000 personas que cada día transitan o realizan trámites ha generado un alza de ventas para los distintos locales que funcionan en el sector.

Para Paola Meneses, dueña y administradora del restaurante Morena Bistró, “estamos todos los locatarios muy contentos de que haya llegado la municipalidad al edificio porque eso significa que nos están tomando en cuenta, ha habido un cambio y ya tenemos mayor vigilancia y mayor aseo”. Jaime Zamora, barista y cocinero de Callejón Café, ubicado a solo unos metros del edificio, afirma que “se ha notado el aumento del flujo de gente, que ha sido positivo, en el horario de la mañana sobre todo donde mucha gente compra para llevar”. En tanto Omar Reyes, presidente de la Asociación Gremial Barrio Puerto y dueño del restorán “La Piká Cultural”, valoró el nuevo aire que vive el sector e invitó a la comunidad a que visiten el Barrio Puerto y sus locales emblemáticos.

Para nuestra directora ejecutiva, Macarena Carroza, «el 87% de los inmuebles en el sitio patrimonio mundial son de propiedad privada y gran parte de ellos, sobre todo en la zona fundacional del barrio puerto, se encuentran en desuso, lo que provoca riesgos como incendios, ocupaciones e inseguridad. Repoblar el centro histórico es una de las estrategias del plan de gestión, y el ejemplo de La nave y el esfuerzo privado y público que representa es una de las acciones que queremos fomentar.»

Historia de «La Nave»
Construido en 1912 por el comerciante español Francisco Caralps, el edificio Caralps (más conocido popularmente como “La Nave” por el restorán que en 1950 albergó en su primer piso marcó el inicio de las tendencias de la arquitectura moderna en el siglo XX, constituyéndose de inmediato en un hito de ingreso a la calle Serrano y al Barrio Puerto de Valparaíso.

El proyecto inicial contemplaba una edificación de ocho pisos pero sólo se construyeron cinco, y los otros tres quedaron en obra gruesa. A pesar de su ubicación, en uno de los vértices de la plaza Sotomayor, la mayor parte de su historia el inmueble de 3.500 metros cuadrados ha permanecido desocupado. Entre 1950 y mediados de la década del 70 su primer piso fue ocupado por el ya mencionado restorán La Nave, mientras que algunas dependencias de los niveles superiores funcionaron como imprenta y otros talleres.

En 1998 el municipio mostró interés por el edificio y se repararon su fachada, torreón y otras instalaciones, pero la iniciativa no fructificó. Posteriormente en el año 2019 su propietario actual Roberto Rosso y el arquitecto Claudio Muñoz iniciaron un proyecto de rehabilitación integral del edificio, que en su interior se encontraba sólo en obra gruesa. Una vez terminado el proyecto en 2022, la administración del alcalde Jorge Sharp selló un contrato de arriendo para su uso.

Un dato curioso es que, impresionado por las consecuencias del terremoto de 1906, Francisco Caralps pidió instalar vigas de trenes en los muros del edificio, las que han protegido a la construcción de los sismos hasta el día de hoy.

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